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La importancia de un buen empaque de vinil 

El buen funcionamiento de puertas y ventanas de aluminio depende en gran medida del sello o empaque vinil que se utilice en su instalación. Este empaque vinil, cumple una función esencial: 
sellar correctamente la ventana para evitar filtraciones de aire, ruido y humedad.

Un buen empaque vinil otorga aislamiento acústico. Sin un sellado adecuado, el ruido exterior puede entrar fácilmente, afectando la tranquilidad dentro del espacio. El empaque vinil, por su flexibilidad y resistencia, ayuda a amortiguar los sonidos, creando un ambiente más silencioso y confortable. 

El empaque de vinil protege contra las corrientes de aire. Cuando las ventanas tienen espacios por donde se filtra el viento, pueden hacer que la temperatura interior varíe, aumentando el consumo de energía para calefacción o aire acondicionado. Un buen sellado con vinil evita estas filtraciones, permitiendo una mejor eficiencia energética y mayor comodidad. 

 

Otro aspecto clave es la resistencia a la humedad. Si el empaque vinil no es del tamaño adecuado, o está mal instalado, el agua de lluvia o la condensación pueden filtrarse, generando problemas como manchas, moho o incluso daños estructurales. El vinil actúa como una barrera impermeable, evitando que el agua entre y protegiendo el interior. 

 

En resumen, un buen empaque de vinil mejora la acústica, evita la entrada de aire y protege contra la humedad, asegurando que las puertas y ventanas cumplan con su función de manera eficiente y duradera.  Elegir materiales de calidad y garantizar una instalación correcta, además de un mantenimiento periódico, es clave para disfrutar de los beneficios que ofrece este sellado.

¿Cómo dar mantenimiento al vinil de PVC?

Los empaques de vinil para puertas y ventanas, aunque hay varios materiales, los más comunes están fabricados de plático PVC. Aunque éste material es altamente resistente y duradero, puede degradarse con el tiempo debido a la exposición prolongada a factores ambientales como la radiación UV, la humedad y cambios extremos de temperatura.

Sin mantenimiento alguno, el material expuesto a la intemperio, el tiempo de vida útil del material es de aproximadamente 8 a 10 años, lo que lo convierte en una opción confiable para diversas aplicaciones. Al cabo de ese tiempo podrás ver que el material se hace "chicloso", se hace quebradizo o bien, se cuelga del marco de la ventana.

Con la aplicación de un mantenimiento periódico apropiado, los empaques de vinil de PVC pueden triplicar su durabilidad alcanzando hasta los 25 años en buenas condiciones. Solo tienes que seguir dos sencillos pasos cada seis o doce meses,
preferentemente antes de la temporada de calor y al finalizar la época de lluvias, para extender su vida útil.

Retira polvo y suciedad con un paño seco

Esto evita que los residuos acumulados afecten la flexibilidad del material.

Puedes usar una microfibra o un cepillo de cerdas suaves.

Si es necesario, lava con agua y jabón

Si el empaque vinil tiene ha acumulado grasa o tiene manchas difíciles, lava con agua y jabón neutro

Seca perfectamente bien y evita usar productos abrasivos.

Lubrica con un producto especial para el material

La aplicación de un lubricante evita el endurecimiento y la pérdida de elasticidad.

Puedes aplicar un lubricante enriquecido con protector-UV para mejor resultado.

Lubricante para plástico con protector UV

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